El montacargas es una de las máquinas más versátiles que existen, siendo competentes en una gran cantidad de rubros y áreas de trabajo.
Este equipo móvil de contracarga tiene como principales funciones de mover, levantar, bajar cargas con poco o nulo esfuerzo manual. Permitiendo que así puedan transportar una amplia gama de materiales o cualquier tipo de objeto. Esto las convierte en máquinas perfectas para el trabajo logístico, ya que, permiten la optimización del espacio en los galpones o bodegas de almacenamiento.
Son máquinas muy precisas y dinamizan en gran parte las tareas de organización y orden, reduciendo el personal utilizado y optimizando el tiempo de trabajo. Además, posee dos versiones distintas. El montacargas de combustión interna y el eléctrico, ambos son idénticos en funciones, pero tienen espacios de utilización distintos.
Son máquinas de tamaño medio y pequeño, por lo que su maniobrabilidad y uso no es tan complicado como lo puede ser una retroexcavadora, por ejemplo. Por esta razón, en este artículo te daremos 7 consejos al momento de maniobrar un montacargas.
Certificación del operador
Este punto es el primero y el más importante. El operador del montacargas debe contar con una certificación que acredite su capacidad para maniobrar esta máquina. Es decir, debe tener la licencia y estar entrenado para llevar a cabo esta labor. De no ser así, podrías ser multado por tener operadores sin los certificados mínimos.
Ropa y equipo de seguridad
Es un requisito de seguridad llevar la ropa y el equipamiento adecuado al momento de operar esta maquinaria. ¿Cuál es el equipo de seguridad para manejar un montacargas? Consiste en casco, botas de seguridad y chaquetas reflectantes. Es muy importante que todo esté bien acomodado y nada que suelte, para evitar que se pueda atorar con algo. También es vital tener las manos limpias y sin ningún tipo de material que pueda dificultar la maniobrabilidad.
Examinar la máquina antes de subir
El operador siempre debe realizar un chequeo rutinario al equipo. Revisar los frenos, volante, controles, dispositivos de advertencia, mástil y llantas. Si se detecta algún problema o daño preocupante, se debe notificar y sacar al montacargas de circulación hasta que sea reparado, así se evita cualquier tipo de accidente.
Correcta posición de operación
En el momento en que se pone en marcha el montacargas, el operador debe hacer uso de las instrucciones para sentarse correctamente en él. Esto es importante para evitar cualquier percance. Antes de arrancar, se debe asegurar que todos los controles del equipo están al alcance y la posición del asiento y espejos se ajustan a las necesidades del operador a cargo. No se debe arrancar antes de que todo esté en su posición y que se hayan tomado todas las medidas de seguridad correspondientes.
Tomar en cuenta el ambiente exterior
Hay que considerar el ambiente que rodea la obra al momento de operar el montacargas. Se debe prestar atención y seguir las instrucciones y reglamentación que haya en el espacio dónde se está trabajando. Además, manejar solo por los caminos delimitados para el paso de la maquinaria. También hay que considerar las señales, sobre todo las de máxima carga permitida y alturas de carga en los momentos que se entre o se salga de un edificio.
Operación a una velocidad segura
Operar a una velocidad segura y no exceder los límites de velocidad es algo que se debe cumplir siempre para evitar accidentes. No sobrepasar los límites y tomar las curvas de forma lenta para minimizar el riesgo de inclinación. Además, siempre mantener una distancia segura, ya sea de otras máquinas o de los mismos trabajadores.
Asegurar la carga
Asegurar que la carga es estable y segura es vital, ya que evita desprendimientos. Hay que comprobarlas cuidadosamente antes de poner en marcha el montacargas, revisando que esta no se incline solamente un poco hacia atrás, para añadir estabilidad al equipo. Nunca se debe sobrecargar la máquina, ni tampoco operar con una carga no asegurada.
Estos 7 consejos son muy útiles para la correcta manipulación de esta máquina y para evitar la mayor cantidad de accidentes que puedan ocurrir. Siempre que podamos reducir los riesgos debemos hacerlo, ya que es mejor para nosotros como compañía y para nuestros trabajadores también.
